Mi foto
Nombre: Alforja Calasanz
Ubicación: Valencia, Malvarrosa, Spain

miércoles, septiembre 26, 2007

DOCE DÍAS EN el 21ro JAMBOREE MUNDIAL, 2007


Una experiencia verdaderamente inolvidable.
Federico Fernández
Delegación de Costa Rica, Jamboree Mundial 2007

Llegamos al parque de Hylands, cerca de Chelmsford en las afueras de Essex en Inglaterra, el 27 de julio de 2007. Con un área aproximada de 300 hectáreas era una localización perfecta para celebrar uno de los acontecimientos más grandes que se realizarían en el Reino Unido en los últimos años. Scouts y Guías de todos los rincones del mundo, nos reunimos para trabajar juntos y para demostrarle al resto del mundo que podríamos y viviríamos en paz y armonía durante los doce días del 21 Jamboree Mundial.

El Jamboree Mundial es el acontecimiento más importante en la historia del movimiento Scout. Este movimiento fue fundado por Sir Robert Stephenson Smyth Baden-Powell de Gilwell, un soldado y un héroe británico, o simplemente “B-P”, como lo llaman los miembros del Escultismo.

Como el mismo Baden-Powell lo dijo, se le llama Movimiento Scout: “porque se mantiene moviendo hacia delante. Si dejara de moverse se convertiría en una organización y no sería más escultismo”.

Baden-Powell comenzó en 1907, con un campamento experimental en la isla de Brownsea en el Reino Unido, para 20 muchachos procedentes de una amplia variedad de ámbitos sociales. Él mismo fue quien también realizó el primer Jamboree en Olympia, en Londres, en 1920.

La palabra “Jamboree” viene del Swahili, donde Jambo significa “hola”. Los jamborees mundiales se han llevado a cabo cada cuatro años desde entonces.

Para todas las religiones y culturas reunidas en el evento, el tema para este Jamboree fue: “Un mundo, una promesa”.

A su llegada al Jamboree, todas las delegaciones fueron divididas en 16 subcampos donde todos los participantes tomarían parte de una gran variedad de actividades diurnas así como programas especiales para la noche.

El subcampo llamado “Lagoon” (laguna) fue donde la delegación de Costa Rica durmió, comió y se reunió durante todo el acontecimiento junto con 1.800 jóvenes de tropas de otros 35 países (Austria, Bélgica, Chad, Chile, Costa Rica, Dinamarca, Ecuador, Finlandia, Francia, Alemania, Hong Kong, Islandia, La India, Irlanda, Israel, Italia, Japón, Malta, México, Mónaco, Namibia, Nepal, Países Bajos, Noruega, Perú, Polonia, Portugal, Federación Rusa, España, Suecia, Suiza; Scouts de China, Togo, Reino Unido y los Estados Unidos).

Todos nosotros, estábamos alrededor de un “Hub”, un centro base de servicios y facilidades que proporcionaba todas tas necesidades básicas para el subcampo.

El segundo día, caminando hacia la arena principal, mis expectativas eran inciertas. ¡Mi primer Jamboree Mundial!. En ese momento, yo estaba muy emocionado y orgulloso de representar a mi país en la celebración del centenario de la fundación del movimiento scout.

Aquella cantidad de personas. Zumbidos y murmullos en toda la arena principal; había australianos, italianos, egipcios, nicaragüenses, chilenos … La delegación coreana golpeaba sus tambores, y por supuesto la tradicional sirena de niebla británica, que no podía faltar; entre muchas de las otras 158 emocionadas delegaciones que aguardaban con impaciencia el inicio de la ceremonia de inauguración del Jamboree.

Yo estaba cegado por un mar de colores. Cuarenta mil personas en sus diversos y coloridos uniformes de guías y scouts. Numerosas banderas. Era muy difícil realizar la magnitud de este acontecimiento, realmente impresionante, sin palabras.

En medio de la arena el escenario estaba custodiado por 16 caballeros en sus vistosas armaduras y hermosos corceles, quienes hacia unos minutos nos habían escoltado desde nuestros subcampos hasta la arena principal.

La cuenta regresiva comenzó y la muchedumbre apenas si podía estar tranquilamente sentada. Los campanazos del Big Ben sonaron a través de la arena. El tiempo tan esperado había llegado. Los pirotécnicos cesaron llamando inmediatamente la atención de todos los ahí presentes.

Bailarines de los 4 países que componen el Reino Unido: Inglaterra, Irlanda del Norte, Escocia y el País de Gales; tomaron sus lugares en el escenario para realizar su primera actuación de la canción Right Here, Right Now” (justo aquí, justo ahora), de Fatboy Slim. Banderas y globos gigantes también de estos países anfitriones estaban por todas partes.

Entonces, cada país representado en el Jamboree llevo su bandera nacional sobre la escena no para que el resto del mundo scout las pudiera ver. Y allí estaba... ¡tan hermosa como es...! la bandera de mi país, la Bandera Nacional de Costa Rica, mostrando que una delegación de 42 personas (10 muchachos scouts, 11 muchachas guías, el equipo de apoyo y dirigentes) estaba allí también. Y justo cuando el último país fuera anunciado, como es costumbre en este tipo de eventos, el anfitrión, el Reino Unido... la arena entera se unía en agitar sus pañoletas del Jamboree al aire.

El Duque de Kent y su sobrino, el príncipe Guillermo, quienes habían llegado hacia un rato atrás en un helicóptero, fueron presentados formalmente. Los flashes de miles de cámaras se iluminaban por toda la arena, ya que 40.000 personas querían capturar aquella imagen duradera del futuro rey de Inglaterra.

El príncipe fue invitado a inaugurar el evento aunque el mismo no hubiera sido nunca scout.

El Duque dio un breve discurso acerca del Escultismo y leyó una nota con el saludo de Su Majestad La Reina Isabel II para los scouts y guías que allí nos encontrábamos y del mundo entero. El Equipo de Paracaidismo de Exhibición Real de la Princesa de Gales, Los Tigres”, entregó en la arena, la famosa bandera color púrpura del escultismo bajando desde el cielo y dejando rastros anaranjados de humo que los se guían hasta abajo.

Las banderas de todos los países, se agitaban y bailaban en el escenario con el fabuloso ritmo de la canción de ‘Yambo” y después de las palabras del director del Jamboree, Buí Cockroft y de Peter Duncan, jefe Scout del Reino Unido, la atmósfera festiva continuó hasta que todos nosotros regresamos de nuevo a los subcampos. En ese momento, todo lo que yo podía esperar era que el siguiente gran acontecimiento, el “Sunrise Day” (el día del amanecer) fuera tan colorido e impresionante como había sido la ceremonia de inauguración.

En el Jamboree, participamos en actividades tradicionales: manualidades, música y juegos, festivales de comida, así como en programas de aventura, entrenamiento y servicios comunitarios. También tuvimos actividades de medio día diseñadas para motivar a los participantes a pensar en cómo poder reutilizar los materiales de uso diario y de cómo nuestras acciones, sin importar que tan pequeñas, puedan afectar a nuestro planeta.

Conocimos gente de todos los rincones del mundo e hicimos amistad con todas y todos. Siempre hubo mucha diversión y fue una experiencia de mucho crecimiento y de desarrollo personal.

Algo que todos los scouts y guías participantes disfrutaron mucho, yo realmente lo hice, fue el intercambio de pañoletas y de insignias. No había momento en que no se pudiera ver a alguien queriendo cambiar algún recuerdo de su país por el de otro.

En los días del Jamboree pudimos experimentar una gran variedad de climas, las noches eran generalmente frescas, tuvimos un par de ligeros aguaceros y más de un día bien caliente.

El miércoles 1 de agosto, a las 8:00 de la mañana, hora local, todo scout y guía, del pasado y del presente en el mundo entero renovó su promesa del ‘Escultismo’. Una promesa de trabajar para la paz y de ayudar a construir un mundo mejor. Una promesa de ser un amigo y amiga de todos y un hermano o una hermana de todos los demás scouts y guías.

Eran las 7:55 de la mañana en el parque de Hylands, el 1 de agosto de 2007. Bajo un sol brillante y sobre una hierba ligeramente húmeda, unos 40.000 scouts en la arena principal esperaban pasar a ser parte de la historia.

El escenario había experimentado una transformación dramática para la ceremonia del “Sunrise’. Las banderas con los colores del arco iris que habían adornado el escenario principal toda la semana, se habían substituido por otras color púrpura con el símbolo internacional de los scouts del mundo en blanco: La Flor de Lis. Asimismo las banderas del mundo se habían substituido por los centenares de banderas color púrpura de los scouts y guías del mundo, representando el gran alcance a nivel mundial del escultismo.

Mi corazón latía rápidamente. El fundador del movimiento scout había inaugurado el primer campamento mundial en la isla de Brownsea, sonando su cuerno de Kudu (especie de antílope que habita desde África del Sur hasta Etiopía) tres veces. Cien años más tarde, el jefe de los Scouts del Reino Unido estaba allí para soplar su cuerno de Kudu también tres veces y marcar el inicio de la ceremonia del ‘Sunrise Day’ a nivel mundial.

Unidos vía satélite con la isla de Brownsea, donde esto estaba pasando; en el parque de Hylands, con gran emoción fui deleitado, al igual que otros 40,000 scouts y guías del mundo, con una ceremonia fantástica del ‘Sunrise Day’, además de ser guiados por Peter Duncan a la renovación de la promesa del Escultismo:
Por mi honor y con la ayuda de Dios prometo hacer todo lo posible para cumplir con mis deberes para con Dios y la patria, ayudar al prójimo en toda circunstancia y cumplir fielmente la ley guía y scout.

En ese momento, vi cómo cientos de palomas fueron lanzadas del escenario y miles de globos de colores fueron soltados al claro cielo sobre Chelmsford.

Bajo el sonido de la música y del baile, comenzamos a recoger firmas en nuestras pañoletas amarillas del ‘Sunrise Day’ de todos aquellos junto a nosotros. Y después de toda clase de diversas actividades, al anochecer, el día terminó con un fabuloso concierto en el escenario principal.

Los días fueron pasando, siempre compartiendo y aprendiendo en numerosas actividades, ninguna menos divertida e interesante que la anterior. A pesar de que hablamos diferentes idiomas, en las actividades internacionales, pudimos trabajar juntos encontrando siempre la mejor manera de hacerlo.

Ya solo quedaban dos días de este asombroso Jamboree. Todo iba pasando muy rápido, allá en casa, en mi país, teníamos casi dos años de estar preparándonos para este evento y ya casi todo terminaba: El 8 de agosto después de la ceremonia de clausura, todos los scouts y guías volveríamos a nuestros países. Yo regresaría a casa con todos los felices momentos gravados en mi memoria para ser recordados por siempre.”

¡La penúltima noche!. Un carnaval se anuncia, ¡qué manera de finalizar!. Los programas de actividades del subcampo. Una extravagancia musical llena de diversión con 200 scouts y guías de los 16 subcampos usando disfraces y trajes representativos. A las 19:15 el desfile comenzó mientras que el resto de los scouts observaban y animaban a lo largo del camino con silbidos y silbatos, gritando, aplaudiendo, y haciendo casi cualquier cosa para ser parte de la diversión.

Y entonces, el 7 de agosto, 40.000 personas en la arena reunidos nuevamente para una última celebración.

Después de días de un brillante sol, el cielo tristemente no pudo contenerse mas para la ceremonia de clausura. Parecía como si el cielo intentara desesperadamente retrasar la lluvia para las festividades, pero no lo logró. Por el contrario, creó su propio escenario digno para la ceremonia, nubes oscuras juntándose lentamente desde horas antes, y algunos estruendos de trueno lanzados para la quizá triste ocasión. Un aguacero de lluvia constante y una obvia caída en la temperatura no detuvo a la muchedumbre de disfrutar de las últimas horas de su tan soñado Jamboree.

Banderas, música, trajes y brillantes accesorios de neón, inundaron la arena... una festividad internacional, la entrega oficial de la bandera oficial del Escultismo del mundo a los representantes de los Scouts y Guías de Suecia, quienes serán los anfitriones del 22do Jamboree del Mundo y cuyo tema será: ¨Simplemente Escultismo”, en el 2011; y por último, los magníficos juegos artificiales que encendieron la arena y deslumbraron a todos los que ahí estábamos.

En el Jamboree, fuimos capaces de olvidar cualquier barrera social, aprendimos cómo trabajar en equipo y cómo ser ciudadanos responsables. El escultismo, realmente crea un mundo mejor.

Una de las muy pocas condiciones absolutas para pertenecer a la Asociación de Scouts y Guías del mundo, es que sus miembros no pueden ser ateos. Se considera como parte muy importante de un scout, el tener alguna creencia y dirección espiritual.

Si cada uno intentara al menos ayudar a otros, el mundo sería un lugar mejor. Debe quedar claro que el ayudar a otros no significa solamente a aquellos que están cerca de nosotros o dar solamente un tipo de ayuda individualizada. Ayudar a otros puede incluso ser, participar en eventos de caridad para recaudar dinero; o algunas veces, salir y hacer uno mismo el trabajo. Podría también ser, tan simple como el estar ahí, cuando alguien más te necesita.

Como lo escribió en una carta el mismo Baden-Powell, para que fuera leída después de su muerte:
“El verdadero camino a la felicidad es dar felicidad a otras personas. Permanezcan unidos a su Promesa Scout siempre y que Dios le ayude a hacerlo. Su amigo, Baden Powell

De vuelta a casa, trataré de seguir siempre adelante, practicando todo y cuanto he aprendido. Pensaré en las situaciones y conflictos que enfrenta el mundo hoy, comprendiendo sus orígenes y consecuencias – actuales y venideras – y en lo que se puede hacer para ayudar a resolverlos y buscaré y lucharé por aquellas cosas que yo pueda hacer para ayudar a mi propia comunidad y país.

Federico
A mis padres por su gran ayuda