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Nombre: Alforja Calasanz
Ubicación: Valencia, Malvarrosa, Spain

martes, noviembre 07, 2006

Reflexiones en torno a la realidad nicaragüense frente a las elecciones del 5 de noviembre de 2006

“NOSOTROS ESPERAMOS UNA TIERRA
Y UN CIELO NUEVOS
DONDE BRILLE LA JUSTICIA” (1 P 3, 13)


“PENSAR EL VOTO ES HACER DEMOCRACIA”

“VIENDO LA MUCHEDUMBRE, SUBIÓ AL MONTE,
SE SENTÓ,
Y SUS DISCÍPULOS SE LE ACERCARON.
Y TOMANDO LA PALABRA,
LES ENSEÑABA
DICIENDO…”


Desde hace algunos meses un grupo de amigos y amigas, religiosos, religiosas, laicos y laicas, venimos reflexionando sobre el momento de gracia y discernimiento que los y las nicaragüenses tendremos que vivir de cara a las elecciones del 5 de noviembre de 2006. Es el momento en donde con decisión firme aceptamos no solo elegir unos líderes sino también compartir el titánico compromiso de hacer una nicaragua más próspera, igualitaria, solidaria y democrática. Como los profetas a los cuales Dios les decía “…ya te he explicado lo que está bien, lo que el Señor desea de ti: que defiendas el derecho y ames la lealtad, y que seas humilde con tu Dios” (Mi. 6, 8) debemos estar preparados para que sea la justicia a los más pobres de nuestro país, la que reine gracias a nuestro voto inteligente y comprometido.

En medio de esta realidad en la que estamos inmersos todos y todas, es nuestro deber alzar la mirada y dejar de lado todas aquellas ataduras que no nos permiten buscar la verdadera felicidad. Es el momento de escuchar la vos del maestro que nos invita a un proyecto concreto, el Reino de Dios, el lugar de las promesas, de la verdadera bienaventuranza. La cual, no se encuentra ni en el poder ni en el dinero, sino que se encuentra en la solidaridad, en la lucha contra todo aquello que pisotee la dignidad humana, llámese pobreza, violencia, corrupción, exclusión, impunidad, desnutrición, analfabetismo y demás. Es decir con fuerza y convicción “Levántate, Señor, extiende la mano, no te olvides de los humildes; tú ves las penas y los trabajos, tú los miras y los tomas en tus manos: a ti se encomienda el pobre, tú eres el socorro del huérfano” (Sal 10, 12-14). Como personas comprometidas con la realidad Nicaragüense se nos lanza la pregunta: ¿dónde extenderemos nuestras manos?.

La reflexión que a continuación presentamos es un esfuerzo, a través de cinco ejes temáticos (gobernabilidad, educación y juventud, salud, mujer y violencia, pobreza y economía), de hacer una radiografía de los principales problemas que aquejan la sociedad nicaragüense y de buscar posibles líneas de acción que nos permitan encontrar salidas a los laberintos en los que muchas veces nos encontramos. Compartimos aquí el sentir de los Padres del Concilio Vaticano II quienes a través de la constitución Gaudium et spes, en su número 74, nos dicen: “la comunidad política nace pues, para buscar el bien común, en el que se encuentra su justificación plena y su sentido y del que deriva su legitimidad primigenia y propia”.

Proponemos un esfuerzo sincero fruto de la reflexión, no de especialistas, sino de personas que optando por el evangelio, encontramos en él una herramienta de discernimiento ético que nos permite tener en suprema estima la dignidad humana. Gracias a esta experiencia de fe que es el evangelio entendemos que la bienaventuranza es la solidaridad desmedida del samaritano frente al desconocido, no la altivez y falsa pureza del sacerdote y el levita; que es aquella viuda que regaló sus dos últimas monedas para subsistir, no aquellos que hacen alardes de solidaridad utilizando dineros producto de la explotación; que es el amor de la mujer que lava los pies de Jesús con perfume y los seca con sus cabellos en un acto de total gratuidad, no la preocupación desmedida por el dinero o los ritos de purificación.

En fin, que la bienaventuranza se encuentra en la denuncia profética de todo aquel sistema que degrade la dignidad de la persona y pregone que el ser humano vive determinado por el interés, el beneficio personal, la acumulación y la avaricia. Es en estos momentos en donde debemos recordad que “el cristiano que quiere vivir su fe en una acción política concebida como servicio, no puede adherirse, sin contradecirse a sí mismo, a sistemas ideológicos que se oponen, radicalmente o en puntos sustanciales a su fe y a su concepción del hombre…” (Octogesima adveniens 26a). La misión esta propuesta, el reto esta hecho, ojalá todos y todas lo aceptemos y disfrutemos como el llamado de los hijos de Dios.


GOBERNABILIDAD

“BIENAVENTURADOS LOS HUMILDES
PORQUE ELLOS POSEERAN EN HERENCIA LA TIERRA”


La gobernabilidad es hoy un tema de suma importancia para el entendimiento de la función pública de los políticos de nuestra nación. De su reflexión podemos hacer una toma de pulso del estado de la democracia en nuestro país, dándonos cuenta de hasta dónde la política es un ejercicio transparente, participativo y descentralizado, con amplio canales de expresión del pueblo y fiscalización de la gestión pública. (PNUD, 2000)

Y es que, no debemos olvidar que la cultura política Nicaragüense ha experimentado serios cambios estructurales que han asimilado un sistema de valores más semejante al modelo democrático. Sin embargo, la fragilidad de la democracia resalta la importancia de que esta cuente con valores que permitan afianzar las instituciones democráticas. El reto de la sociedad consiste en prevenir que las instituciones políticas y los caudillos tradicionales sigan confundiendo el sentimiento democrático a través de la manipulación del poder político para intereses personales.

Ciertamente uno de estos avances en la democracia es la estabilidad electoral que se ha venida dando en la última década. Sin embargo, una verdadera democracia no sólo se centra en el aspecto electoral sino que encierra otros elementos tales como: límites al poder del ejecutivo; poderes judiciales independientes que aseguren el estado de derecho; protección para los derechos individuales y las libertades de expresión, asociación, creencia y participación; restricciones en la capacidad de los partidos para manipular los procesos electorales; garantías efectivas contra los arrestos arbitrarios y la brutalidad policial; inexistencia (o severa limitación) de la censura; medios de comunicación libres del control y dominio del gobierno; y lucha constante contra la corrupción en los cargos públicos producto de la excesiva burocratización de las instituciones democráticas.

El cumplimiento de estas metas en Nicaragua es muy difícil; todavía nos encontramos entre los países en donde la corrupción es considerada sistemática y alarmante. Esto nos lo muestra elementos tales como: los mega-salarios, las licitaciones bancarias turbias, el padrinazgo y manutención judicial y financiera de instituciones públicas y privadas con pésimos servicios de realidades vitales como son el agua y la luz, la falta de transparencia en la rendición de cuentas, las liberaciones sorprendentes de delincuentes, la manipulación de los medios de comunicación social y violaciones contra la libre expresión, la malversaciones de fondos, las desapariciones casi mágicas de dineros en investigaciones policíacas, los despidos políticos, el condicionamiento de leyes necesarias para la sociedad por intereses partidarios, la venta y destrucción indiscriminada de nuestros recursos naturales por la falta de regulación jurídica, el no establecer, en la práctica, como prioridades presupuestarias, la educación, la salud y el combate contra la pobreza: fuente de la desnutrición, el desempleo, la migración y en muchos casos de la violencia.

Ante este escenario tan desalentador no podemos perder la esperanza. Sino que debemos unirnos con mayor fuerza para que nuestros funcionarios se guíen por la ética del bien común y no por el beneficio personal. Debemos alzar la voz contra toda acción que engendre la semilla de la corrupción y promover la vivencia de una democracia que respete la dignidad humana, que proteja los derechos civiles y políticos de los ciudadanos, que fomente la participación en los asuntos públicos y la rendición de cuentas de políticos y funcionarios. Además, es importante que todos participemos en la elaboración de propuestas desde una visión de país e insistamos en el rol protagónico de la sociedad civil. Y que fortalezcamos el proceso de democratización a través de la institucionalización de espacios permanentes y efectivos de negociación e incidencia entre las estructuras del Estado y organismos de Sociedad Civil.



ECONOMÍA Y POBREZA

“BIENAVENTURADOS LOS POBRES DE ESPIRITU
PORQUE DE ELLOS ES EL REINO DE LOS CIELOS”


Grandes son las brechas de equidad que existen en nuestro país. Por estas entendemos aquellas desigualdades de capacidad originadas en la condición social, sexo, edad, región, etnia o nacionalidad de las personas. Es decir, que la persona no puede en libertad escoger el estilo de vida que más valore. Aquí nos referimos con más ahínco a la gran cantidad de pobres que los sistemas económicos excluyentes y poco solidarios crean en nuestro país y en el mundo.

Aportamos algunos datos que puedan ayudar a tomar conciencia de la necesidad de la solidaridad como eje fundamental de nuestro actuar como seres humanos:

Según datos del Centro Nicaragüense de Derechos Humano (CENIDH) en su informe 2004-2005, Nicaragua es uno de los cuatro países latinoamericanos más pobres, el 10% más pobre del país participa del 1.2% de los recursos, mientras el 10% más rico goza del 45% de los ingresos, disponiendo de 84 veces más recursos que el 10% más pobre. A esto sumemos que de 5.3 millones de habitantes, más de 2.4 millones de nicaragüenses viven en la pobreza y 780 mil en la extrema pobreza. Entre 1993 y 2001, la línea de pobreza general solo bajó de un 50.3% a un 45.8%, pero en el mismo tiempo el número absoluto de pobres se incrementó en 300 mil. En este mismo informe se nos dice que la Comisión Económica para América Latina (CEPAL) reportó que el 64% de los nicaragüenses es pobre y que el 46% de estos pobres es indigente. La pobreza extrema sigue siendo profundamente rural, más del 76% de los pobres indigentes residen en áreas rurales, donde sobreviven con menos de un dólar al día.

En Nicaragua dos quintas partes de la población no tienen acceso a agua potable; tres cuartas partes carecen del servicio de aguas negras (alcatarillado sanitario) y dos quintos de las y los niños pobres padecen de desnutrición. Este país tiene el nivel más alto del mundo de deuda externa y en la última década gastó en pagar el servicio de la deuda dos veces y media más que en educación y salud. Según el criterio de la mayoría de especialistas en la materia, dentro de este contexto de pobreza generalizada las mujeres representan un subgrupo particular de pobres que se caracteriza por encontrar empleo dentro de una estrecha gama de ocupaciones, recibir bajos salarios, depender económicamente de los hombres proveedores, la discriminación institucionalizada hacia ellas en el mercado de trabajo y dentro de los espacios políticos.

La pobreza rural acarrea la pobreza urbana, ella va empujando al éxodo hacia las ciudades y al crecimiento incontrolado. (Según el PNUD, hasta el 2007 se prevé que el 50% de la población mundial será urbana y el 60% en 2030, es decir 5.000 millones de personas).

En los últimos años los precios del mercado internacional de han precipitado, arrastrando a muchos empresarios a la quiebra total: Algodón, soya, café, tabaco, arroz, ajonjolí, camarón. Hoy en día los productos agropecuarios que se producen y se exportan, más bien producen pérdidas. La mayor parte de los productos de agro exportación tiene un valor de mercado por de bajo sus costos: el quintal de azúcar cuesta 14 dólares producirlo y se vende a 7 dólares en le mercado mundial; si no fuera por que los consumidores nacionales la comprar a 25 dólares el quintal no quedaría ni un solo ingenio.

El quintal de café cuesta mas 60 dólares producirlo y cuesta 50 dólares en el mercado mundial, (algunos campesinos lo venden a 40 dólares a los intermediarios internos) y así sucesivamente con el resto de los principales producto. Los empresarios agropecuarios que han quedado en pie se encuentran actualmente hipotecados o están embargados.

La población campesina e indígena se encuentra en las peores condiciones y en la mas alejadas tierras de la región, recibe la menor cantidad de servicios sociales básicos, (educación, salud, caminos, transporte, vivienda, agua electricidad, teléfono y creación) no tiene acceso los principales bienes de producción (crédito, bueyes, maquinaria, semillas, insumos) registrando el mayor índice de analfabetismo y desnutrición.

Las causas de este escenario son variadas: en primer lugar encontramos la indiferencia e ineficiencia de las políticas para combatir la pobreza, las cuales se han limitado a paliativos que no permiten una reconversión de la productividad promoviendo una estrategia que promueva un mayor acceso a la tecnología y apoyo financiero del sector agrícola a fin de hacer el producto nacional de mayor calidad y con mayores posibilidades de competencia en el mercado internacional y nacional. El desarrollo del sector turístico por manos nacionales evitando la excesiva invasión y apropiación de nuestros recursos naturales a manos extranjeras que encarecen el acceso a estos servicios excluyendo a la mayoría de la población. El apoyo a la pequeña y mediana empresa como fuente de empleo y reducción de la desigualdad salarial producto de la “mano de obra barata” que promueven ciertos sectores de la industria.

Otra de las causas de estas realidades de pobreza son promovidas por organismos internacionales tales como el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial (BM) que so pena de sacar a Nicaragua de los goces de la ayuda extranjera, impone políticas que sólo benefician al gran capital y dejan de lado la inversión social en educación o salud.

No podemos dejar de mencionar la migración, que como espada de dos filos, es causante de pobreza al dejar al país desprovisto del capital humano para el desarrollo. Pero que lo promuevo gracias a las remesas familiares que incentivan nuestra economía. A pesar que mucho del dinero que ganan nuestros migrantes se suscribe a condiciones muchas veces de abuso, discriminación, violencia y condiciones laborales riesgosas e insalubres.

¿Cómo ir superando esta situación? El Reino de Dios se ha venido construyendo en el transcurso de la historia gracias al sacrificio de hombres y mujeres que han asumido en su vida lo valores de este proyecto y han dado su vida por ellos. La pobreza nos habla de privación, impotencia y vulnerabilidad; solo en la medida que estemos dispuestos ha asumir el reto de disminuir y erradicar estos elementos haremos presente la equidad. Recordemos que el desarrollo humano sostenible como proceso no solo genera crecimiento económico sino que distribuye sus beneficios equitativamente; que regenera el ambiente, en lugar de destruirlo; que potencia a las personas, en lugar de marginarlas. Es tener por prioridad a los pobres ampliando sus opciones y oportunidades y crear condiciones para su participación activa en la sociedad. De esta manera entenderemos que la solidaridad “no sería un sentimiento superficial por los males de tantas personas, cercanas o lejanas. Al contrario, es la determinación firme y perseverante de empeñarse por el bien común; es decir, por el bien de todos y cada uno, para que todos seamos verdaderamente responsables de todos” (Solicitudo rei sociales 38e).




JOVENES Y EDUCACIÓN

“BIENAVENTURADOS LOS QUE TRABAJAN POR LA PAZ
PORQUE ELLOS SERAN LLAMADOS HIJOS DE DIOS”


Nicaragua cuenta ya con el censo oficial 2005. Pese a algunos interrogantes planteados se trata del documento oficial del país relativo a la población y sus diversas manifestaciones. La tasa de crecimiento de la población ha decrecido, lo cual tiene un impacto directo en la demanda educativa actual y proyectada se expresará en datos referidos a la cobertura, particularmente de la matrícula escolar. La cifra de 829.994 niños, niñas, adolescentes y jóvenes entre 3 - 18 años de preescolar, primaria y secundaria no atendidos por el sistema escolar puede que no impacte en la opinión pública, pues, según el censo ha disminuido la relación entre la población que exige educación y la que la recibe. La tasa neta de escolaridad de la educación primaria se mueve en torno al 87% en vez de hacerlo en torno al 80.3% (2005). Según el censo la tasa neta de primaria ha mejorado en razón de la población escolar actualmente atendida.

Sin embargo, tengamos presente que la aventura extraordinaria que propicia ¨la educación para todos¨ consiste en que la equidad –educación para todos- y la calidad –éxito de todos en la educación- se articulen armoniosamente. Y se trata de una aventura nacional, convertida en tarea de todos que en su recorrido se encuentra con múltiples fugas que van disminuyendo el grosor de la cobertura escolar. La repetición y la deserción, debido a una serie de factores asociados, externos unos –cuya raíz principal es la pobreza ampliamente generalizada-, internos otros, debido a la organización y gestión deficientes del proceso educativo con sus múltiples elementos, siguen todavía insertos en el recorrido sistemático que hace el alumno o la alumna grado por grado.

Tenemos una población constituida básicamente por niños, niñas, adolescentes y jóvenes. De la población nicaragüense aproximadamente el 75% son menores de 30 años. El grupo de los 0-14 años representa el 45% de la población. El grupo de los 15-24 años representa un 20% y el segmento de los 25-30 representa aproximadamente un 8% de la población.

Al observar la distribución geográfica del total de jóvenes existentes, encontramos que la mayoría de los jóvenes viven en las zonas urbanas. La juventud urbana representa el 45% de la población total, la juventud rural representa un 28% de la población global.

Actualmente la población escolar (3-17 años) asciende a 2.1 millones de habitantes, que representa el 40% de la población del país; se estima que para el 2015 la población escolar será superior a 2.7 millones de personas, lo que equivale a un aumento anual de 62.000 estudiantes. Y de hecho, sólo el 50% de quienes inician la educación primaria la terminan.

Los datos arrojados por el censo de población 2005 no presentan variaciones en aspectos inherentes a la situación socioeconómica, que en definitiva es la que tiene mayor incidencia en la accesibilidad sostenible de toda la población en el sistema educativo. Más aún reafirman un dato importantísimo: el 37.3% de nuestra población es menor de 15 años, y lo cual acentúa el imperativo impostergable de invertir mucho más en la niñez y adolescencia, de hacerlo en capital humano, en salud y educación.

Nos encontramos en un momento en donde a la juventud actual, no le interesa la política tradicional, no cree en los líderes políticos ni en los partidos políticos y no confía en muchas de las instituciones el país. Las nuevas generaciones conforman cuantitativa y cualitativamente los grupos de mayor significación, necesitan y demandan profundos cambios en todos los ámbitos del sistema del cual se encuentran en su gran mayoría no sólo marginados, como se decía en otras décadas, sino excluidos. Lo cual explica sus múltiples reacciones, la magnitud de las mismas y la necesidad de estudiar el fenómeno en su causa y efectos, por parte del Estado y las organizaciones de la sociedad civil para ser justos y lograr canalizar el potencial de la juventud para construir una Nicaragua en justicia y en paz. El núcleo de este esfuerzo debiera estar orientado en fortalecer el protagonismo juvenil los procesos de formulación y ejecución de propuestas comunitarias y nacionales sobre políticas públicas de juventud que tienen que ver con:

El acceso al mercado de trabajo y la creación de empresas y cooperativas juveniles; la accesibilidad y calidad de los servicios sociales básicos, salud, educación, transporte, comunicación; integración social;

Educación y su interrelación con la sociedad; educación y sus modalidades (formal, no-formal e informal), alfabetización sostenible, educación sexual, ambiental, pluricultural y pluriétnica- conforme la Ley General de Educación- derechos humanos en general y derechos sexuales y reproductivos de los y las adolescentes; legislación – aplicación del Código de la niñez y la adolescencia; promoción del arte y la cultura; juventud con capacidades diferentes- y procesos de integración y rehabilitación.

Juventud campesina y acceso a la propiedad, al crédito y a las tecnologías apropiadas; Seguridad social y alimentación para la niñez y la juventud de la calle; Políticas de población y desarrollo, juventud y desarrollo comunitario; asociacionismo e institucionalidad pública juvenil; situación de mujeres jóvenes.

El desarrollo de Políticas Publicas de Juventud en cuya elaboración, a nivel Nacional y Municipal, participen los y las mismas jóvenes, sustentadas en diagnósticos nacionales, regionales, municipales y locales de juventud en campos de la juventud como pobreza, desempleo, nivel de productividad, educación, salud, participación, sexualidad, violencia, etc. Y en los casos que ya existen leyes como la Ley de Participación Juvenil se lleve a la práctica y se articule con el Código de la Niñez y de la Adolescencia, de manera a nivel Nacional, Municipal, Local etc.

Promover en la juventud una cultura política que fortalezca espacios de integración, promocione las relaciones de solidaridad, priorice un espíritu prepositivo, constructivo, que busca salidas o soluciones, o sea, la búsqueda de una conciencia colectiva creativa, geste un liderazgo, democrático, participativo, que garantice el relevo de las nuevas generaciones y de las mujeres y desarrolle una cultura de la tolerancia y de respeto a la biodiversidad ambiental, cultural, religiosa y política.

Podemos darnos cuenta que la educación de nuestra niñez y juventud es uno de los factores fundamentales para el desarrollo. El trabajo conjunto profesor - alumno es de vital importancia, es por ello que no podemos dejar de mencionar aquí la necesidad de establecer condiciones salariales justas para nuestros educadores / as y un ambiente laboral menos cargado de burocracia y papeleo ministerial, que promueva la creatividad del docente. Es de vital importancia la puesta en vigencia de la Ley General de Educación, herramienta jurídica que permite al sector educativo establecer plataformas de desarrollo más realistas que promuevan un trabajo conjunto entre profesores, familia y estado en favor de nuestra juventud.




SALUD PÚBLICA

“BIENAVENTURADOS LOS QUE TIENEN HAMBRE Y SED DE JUSTICIA
PORQUE ELLOS SERAN SACIADOS”


Nicaragua en los últimos 40 años ha presentado avances en sus respuestas para resolver los principales problemas sanitarios relacionados con la mortalidad materna, perinatal y en menores de 5 años. Muchas dolencias y muertes prematuras son ocasionadas por la desnutrición y las enfermedades endémicas e infecciosas, que se acentúan en una infortunada combinación de pobreza, falta de educación, condiciones de higiene inapropiadas, insuficiencia de los servicios públicos y deterioro de las condiciones ambientales. Persisten además, disparidades entre población urbana y rural y en los grupos sociales afectados por mayores niveles de pobreza. A continuación se presenta en un orden de prioridad, las principales causas percibidas como de naturaleza estructural:


  1. 1 - Debilidades del marco jurídico.

    La deficiente aplicación de las políticas de salud establecidas en la Ley General de Salud permite entre otras inequidades, la manipulación del desarrollo y la ubicación adecuada de los recursos humanos y materiales, acordes al perfil de transición epidemiológica, y a la distribución geográfica de los problemas prioritarios de salud.



  2. 2. Inefectividad, ineficiencia y poca transparencia de programas que contribuyan a disminuir la pobreza.

    La pobreza limita el acceso a los alimentos, a los servicios de salud y a la compra de medicamentos, así como a otros bienes y servicios que favorezcan el bienestar de la población. Esto es particularmente crítico en la población de niños y niñas menores de cinco años, debido a que incrementa su vulnerabilidad, encontrando como causas de enfermedad y muerte, la desnutrición, la tuberculosis, la parasitosis intestinal y los accidentes.

    Nicaragua, de acuerdo con un dossier de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) que circuló en la reunión de Washington, es el segundo país centroamericano que registra los mayores índices de pobreza, con 63 por ciento. En primer lugar está Guatemala, con 75,2 por ciento; y en tercera posición se ubica Honduras, con 50 por ciento.

    Las principales causas de la mortalidad infantil siguen siendo las Enfermedades Diarreicas Agudas (EDA), y las Enfermedades Respiratorias Agudas (IRA), destacando la neumonía como la más común. Entre otras causas de mucha relevancia son los nacimientos prematuros, problemas de bajo peso al nacer, asfixia y sepsis. En términos nutricionales (disponabilidad de calorías), Nicaragua le sigue a Guatemala, con 2,328 kilocalorías por persona a diario. Honduras, la nación más devastada por el huracán Mitch, supera levemente a nuestro país, con 2,368 kilocalorías.


  3. 3. La pobre inversión en salud.

    Es necesario seguir destacando la salud como un factor determinante para el desarrollo para poder tender puentes entre los defensores de la salud pública y los tomadores de decisiones políticas y de financiamiento para incidir en que se incluya a la salud dentro de las estrategias de desarrollo socioeconómico, así como en proyectos y negociaciones de préstamos con los donantes. De acuerdo con un estudio realizado por Naciones Unidas enfocado a los escenarios de inversión social para alcanzar las Metas del Milenio se estima que el presupuesto asignado para las actividades de mejoramiento de los servicios de salud materno-infantil deberían incrementarse en un 4.1% por año en términos reales, aumentando desde US$112 millones en el 2001 a US$196 millones en el 2015, lo que equivale a un gasto acumulado de US$2.5 mil millones en el mismo período.


  4. 4. Deficiente acceso y calidad de servicios de salud.

    En Nicaragua de un total de 5,4 millones de habitantes más de la mitad son mujeres. La población se concentra en el Pacífico donde reside el 57%, en comparación con el 31% de la Región Central y el 12% de las Regiones del Atlántico. Se calcula que por lo menos el 10% de la población es de ascendencia indígena y crece a un ritmo del 2,6% anual. El 58,3% vive en el área urbana, pero en la mitad de los departamentos hay predominio de población rural. En las zonas rurales donde la población más pobre es la que tiene más problemas para acceder a los servicios de Salud por las largas distancias que tienen que recorrer sumado al mal estado de las carreteras y caminos. Además existe un deterioro general del abastecimiento de insumos médicos y no médicos en muchas unidades de salud.


  5. 5. Baja calidad y cobertura de la atención prenatal, parto y puerperio.

    Cada año mueren en Nicaragua alrededor de 144 mujeres en edad reproductiva, sin incluir el alto subregistro de casos que se calcula hasta en un 50%. La mortalidad materna representa cerca del 4% de todas las causas de muerte. Más del 70% de las muertes maternas registradas por el MINSA provienen de áreas rurales; y casi la mitad tiene de 20 a 34 años de edad. Una de cada 3 mujeres que mueren son adolescentes especialmente de los departamentos de Jinotega, Chontales, Matagalpa y la RAAN. Las madres adolescentes (menores de 20 años) son consideradas de alto riesgo, porque sus hijos tienen mayor posibilidad de nacer con bajo peso mayor mortalidad infantil y mayor tendencia al destete precoz. Es necesario desarrollar acciones de monitoreo, seguimiento y evaluación de la oferta y la calidad de los servicios en todos los niveles de atención; promover la atención prenatal, parto y puerperio para disminuir los riesgos de muerte materna. Implementar programas especializados que contribuyan a promover el conocimiento y reconocimiento de signos de alarma; de la sensibilización a los grupos y poblaciones que viven en situación de pobreza acerca de la importancia del auto cuidado; de la promoción de la educación en salud reproductiva, sexual y de planificación familiar, la atención psicológica para los casos de violencia intrafamiliar en mujeres embarazadas; y promover la participación masculina en la atención prenatal.


  6. 6. Deterioro de la infraestructura en servicios sociales básicos.

    Particularmente en zonas rurales donde existen precarias condiciones de vivienda, falta de acceso a los servicios de abastecimiento de agua, alcantarillado sanitario, y recolección de basura, lo que favorece la transmisión de enfermedades vectoriales, diarrea y enfermedades respiratorias.


  7. 7. Enfoque inadecuado de la Educación como determinante para mejorar la salud.
    Una limitante que se agrega a los problemas del desarrollo humano de la población es la alta tasa de analfabetismo que se registra, principalmente en las áreas rurales, lo que trae también como consecuencia la existencia de un déficit importante de educación sanitaria de la población que por ende desfavorece las prácticas saludables en la salud materna infantil. Las mujeres en edad fértil (MEF) representan el 49% del total de mujeres, 14% son analfabetas y solo un 10% alcanzó algún grado de educación superior. Una de cada 4 mujeres adolescentes, entre 15 a 19 años, de edad ya son madres o están embarazadas, representando el 18% del total de embarazos. Se ha identificado que existe un enorme vacío relacionado a los conocimientos de cómo prevenir la mayor parte de los problemas de salud lo que trae como consecuencia de graves problemas de salud que son totalmente prevenibles.


MUJER Y VIOLENCIA

“BIENAVENTURADOS LOS LIMPIOS/AS DE CORAZÓN
PORQUE ELLOS / AS VERAN A DIOS”


En Nicaragua las mujeres históricamente hemos vivido en sometimiento de una cultura patriarcal y machista, en donde un alto por ciento de las Mujeres vive y procede de hogares desintegrados y están viviendo en condiciones de pobreza cargadas de mucha violencia.

La situación de la Mujer en nuestro país es muy crítica y la violencia la padece desde su primera infancia y hasta su ancianidad. A modo de ejemplo y para tener una mejor conciencia de la gravedad de la situación, queremos compartir con ustedes unos cuantos datos. Según estudios de la Red de Mujeres contra la violencia del 2000 al 2005 la violencia aumentó en un 300% pasando de dos mil casos en el 2000 a más de doce mil en el 2005. El CENIDH nos dice que en 2005 recibió 195 denuncia de violencia contra la mujer. Los primeros 6 meses de este año ha recibido 216 denuncias.

En un estudio de Carmen Calve hecho en 1995 sobre la violencia intrafamiliar (Confites en el infierno), señalan que el 94% de las mujeres que recibieron maltrato padecieron violencia física junto con ofensas y humillaciones. El 31% recibieron golpes estando embarazadas. De las mujeres que han vivido maltrato 1 de cada 3 han sido obligadas a tener relaciones sexuales. Y la mitad de mujeres maltratadas expresan que fueran maltratadas en presencia de sus hijos - as. No hay datos de estos últimos años, pero en el 2000 habían 1200 mujeres ejerciendo la prostitución en 50 lugares de Managua y de ellas el 40% son menores de 18 años.

Según un estudio de Puntos de Encuentro (año 2000) una de cada tres mujeres han sido golpeadas por su pareja y dos de cada cinco mujeres maltratadas recibieron golpes mientras estaban embarazadas. Además habría que tener datos de cómo quedan afectadas emocionalmente por el maltrato. En el 2005 hubo 67 femicidios en Nicaragua. Y en el 2006 ya van 24 docenas de mujeres asesinadas

Vemos como en estos datos se nos presenta un aumento en la violencia ejercida contra la mujer, en muchos casos por sus propias parejas de vida. Ciertamente se ha avanzado en la igualdad de derechos, sin embargo todavía impera la violencia fruto de la falta de educación de la masculinidad de los hombres. Esto promovido muchas veces por la falta de resolución y acción rápida en los casos, sintiéndose en muchas veces un ambiente hasta de impunidad para con los mismos agresores.

En apartados anteriores hemos venido viendo la situación de la mujer en cuanto igualdad de ingresos y participación en la producción. En su situación en el sector salud y en el educativo y su participación activa en los puestos de gobierno. En todas estas áreas se verifica la necesidad de establecer canales más fluidos de acción que permitan tomar decisiones claras en torno a estos temas.

La búsqueda de la igualdad de género y la erradicación de la violencia es parte de los Objetivos del Milenio en donde Nicaragua se ha comprometido a establecer igualdad de oportunidades para hombres y mujeres. Para ello se establece que se realizarán acciones a fin de mantener una equilibrada matrícula entre hombres y mujeres en el sistema educativo, se eliminarán los estereotipos acerca de los hombres y mujeres en la sociedad y se realizarán políticas y acciones de igualdad de oportunidades, una de ellas es la formulación de la Ley de Igualdad de Oportunidades y el apoyo a la mujer empresaria y productora en nuestro país.




“BIENAVENTURADOS SERAN
CUANDO LOS INJURIEN Y PERSIGAN POR MI CAUSA…
ALEGRENSE, REGOCÍGENSE,
PORQUE SU RECOMPENSA SERA GRANDE EN EL CIELO,
PORQUE DE LA MISMA MANERA PERSIGUIERON A LOS PROFETAS ANTERIORES A USTEDES”


Decía el papa Juan XXIII en su encíclica Mater et Magistra, número 219: “el hombre es necesariamente fundamento, causa y fin de todas las instituciones sociales”. Es así como el ser humano se convierte en los lentes con los cuales vemos la realidad, es la herramienta de interpretación por la cual, la política, el comercio, las relaciones de género, la educación, la salud, tienen sentido. Es por ello que es necesario que como cristianos dispuestos a comprometernos en la construcción del Reino de Dios no podemos olvidar del ser humano. Ese es el pecado de los sistemas económicos y en muchas ocasiones de los partidos políticos, se fijan primero en las acciones a realizar y se olvidan del sujeto de las acciones. Se plantean hermosos programas de gobierno en donde se dicen se encuentran soluciones y nos olvidamos del trato fraterno y cercano con nuestros hermanos más empobrecidos.

En el transcurso de esta reflexión se han constatado aquellos elementos que permiten tener un panorama claro de las necesidades más importantes de nicaragua, pero sobre todo sabemos quienes son los verdaderos protagonistas del cambio y que esfuerzos se pueden ir realizando de cara a alcanzar la tan ansiada felicidad. Sin embargo, debemos tener cuidado de no perder de vista que la felicidad no es algo abstracto que ganamos según nuestros méritos al final del camino de la perfección. No, la felicidad se encuentra, como nos dice Jesús en las bienaventuranzas, en el pobre, en el perseguido, en el que lucha por la paz, en el humilde; en aquellos que las sociedades rechazan por creer que se encuentran en la vergüenza, olvidando que son estos los que heredarán el Reino de Dios.

Junto con la comunidad cristiana de Nicaragua sabemos “reconocer el gran mérito de aquellos políticos decididos que tienen el valor de continuar las negociaciones, incluso cuando la situación parece hacerlas imposibles” (Mensaje Jornada mundial de la Paz 1999, No.11).

Porque la tarea no es fácil, pero la felicidad de saber que cooperamos hasta donde dan nuestras posibilidades en la construcción de esta nación es una recompensa que dura en la eternidad.

Es en esta reflexión día a día, donde encontrare nuestra esperanza en una sociedad que se una en un sueño común. Ya lo diría Gioconda Belli “es hora de la meditación y tejo un sueño, porque aprendí que los sueños son posibles”. En Nicaragua son posibles los sueños, la riqueza cultural tanto en la literatura, la pintura, la música, la poesía y otras artes, nos recuerda que los artesanos/as de los sueños somos nosotros mismos; el conocer y valorar la riqueza de nuestra flora y fauna nos hace respirar con fuerza, tomando el aire como bastón que nos ayude en el camino; es saber que “a pesar de las cruces y los pactos el amor bajo el hombre está creciendo, a pesar de la muerte y de la guerra, el amor bajo el hombre está creciendo” nos recordaría Jorge de Bravo.

Adelante, pensar el voto es construir democracia, adelantar el Reino, vivir en la bienaventuranza, compartir la felicidad.